Decreto ómnibus aprobado en primera votación, las nuevas prestaciones por desempleo cayeron mientras Podemos vota en contra de la medida propuesta por Yolanda Díaz
Tras tener que volver a votar tras un empate inicial, el Gobierno finalmente logró aplicar el decreto sobre medidas anticrisis, que incluía una reducción del IVA sobre las ayudas a los alimentos, la energía y el transporte. En el último momento, Moncloa consiguió que Jutes se abstuviera en la votación de este miércoles a cambio de una serie de transferencias, entre ellas el control total de la política de inmigración a Cataluña, artículos eliminados que conducen a la amnistía de la Puerta de Parálisis en Europa, publicación inmediata de los balances fiscales, responsabilidad en las subvenciones al transporte público, el reconocimiento de los «derechos históricos» de los entes locales de Cataluña, el fomento del retorno de las empresas a las comunidades autónomas y la supresión del IVA sobre el petróleo.
La votación continuó con Junts votando 172 a favor, 171 en contra y 7 abstenciones. En la votación inicial, un error del diputado de Soumare, Gerardo Pisarello, resultó en un empate a 171 votos.
En sus primeros esfuerzos, el gobierno ha implementado con éxito decretos integrales, que incluyen medidas de digitalización judicial, entre otras.
Otra suerte corrió el decreto que regula la reforma de las prestaciones por desempleo y las medidas para conciliar la vida laboral y familiar. La iniciativa lanzada por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, fue derrotada por 176 votos en contra y 167 a favor. En este caso, al rechazo se sumaron PP, Vox, UPN y cinco representantes de Podemos. En esa votación tampoco participaron representantes de Junts.
El Presidente, ministro de Justicia y Relaciones Parlamentarias, Félix Bolaños, inauguró temprano en la mañana el pleno del Congreso, y el gobierno arriesgó su estabilidad defendiendo tres decretos y presentándolos como una opción binaria: «Proteger a los ciudadanos o perjudicarlos». La intervención gira en torno a esta dicotomía, ya que si no se aprueba el decreto gubernamental, se suspenderán todas las medidas contenidas en él y ya implementadas.
Bolaños instó en vano a Jutes a aprobar decretos gubernamentales
«No hay ninguna razón ideológica para no apoyar estas medidas legislativas que harán la vida más fácil para las personas y las familias. Cuando llegue el momento de votar, les pido que consideren estas medidas, no los intereses partidistas. Su voto de hoy determina los precios de los alimentos de mañana. «En la factura de la luz, en las pensiones… Por eso pido que sigamos por el camino de la protección social y la justicia. La sociedad no quiere volver a más de cinco años de recortes sociales», afirmó la ministra.
Los comentarios de Bolaños sugieren que a pesar de sus esfuerzos, el gobierno no pudo reunir todos los votos necesarios para validar sus tres iniciativas. Además de los rechazos del PP, Vox y UPN, el principal obstáculo viene de dos organizaciones aliadas de Sánchez: «Fuerzas Unidas» y «Podemos». Principalmente el partido catalán liderado por Carles Puigdemont, que, según fuentes del Partido Socialista Español, había advertido al inicio de la reunión que tenía intención de no aprobar las tres iniciativas.Presidente parlamentario del Partido de la Independencia Miriam Noguerasignorando la posibilidad de que Sánchez convoque una reunión mañana Consejo de Ministros Evidentemente, la «aprobación de nuevos decretos» debería negociarse previamente con ellos. ERC también baraja esta posibilidad -como publica hoy Le Monde- y según fuentes parlamentarias Sánchez ya está barajando formas de paliar el fiasco si su propuesta es rechazada.
Jutz dijo que los decretos fueron un «error» y que el gobierno «tiene tiempo para corregirlo».
Nogueras: «Nuestros votos son para Cataluña»
Nograles subió al podio durante un debate sobre el tercer decreto del gobierno dedicado a brindar ayuda para mitigar los efectos de la guerra en Ucrania. Un portavoz de Junts recordó al ejecutivo que «la estabilidad de la Legislatura depende del cumplimiento del acuerdo» e insistió en que sus siete votos «no serán canjeados por nada».
El representante ha pedido al Gobierno que modifique estos decretos y llegue a un consenso, en cuyo caso Junts los apoyaría. «Nuestros votos son para Cataluña y los ciudadanos de nuestro país, no para vosotros ni para los ciudadanos del reino», ha afirmado, recordando su propuesta de formación e insistiendo en que quienes estaban convencidos de la «malicia» de Cataluña lo dijeron antes de abandonar la empresa en Cataluña. . PP «Con la ayuda del rey». En este sentido, ha subrayado la necesidad de reformar la Ley de Sociedades de Capital e incentivar a las empresas que decidan regresar a Cataluña y sancionar a las que no. «Todo lo que pedimos es compatible con Cataluña», ha asegurado, antes de subrayar que sus propuestas eran razonables y que la Legión apoyaría al Gobierno si fueran aceptadas, pero sólo en este caso. «Las cosas no van a volver a ser como antes», concluyó Nograles.
Junts suma siete votos cruciales para la ejecutiva, que el Gobierno considera empatados a tenor del acuerdo firmado y de las concesiones realizadas en las negociaciones encaminadas a invertir en Pedro Sánchez, sin embargo, el Partido Independentista optó por subirles los estándares exigidos. causará serios problemas al gobierno una vez que comience la legislatura. El partido de Puigdemont optó por intervenir únicamente en el debate sobre el tercer decreto para defender su posición.
En respuesta al ministro Bolaños, diputado de Podemos martina velarde Lamentó que el Gobierno no haya negociado con el Partido Morado, pero al menos cinco representantes de este partido votaron a favor de un decreto denominado «ómnibus», cuya aprobación depende del pago de un nuevo paquete de ayuda europeo de 10.000 millones de euros. . Fue este decreto el que despertó las mayores reticencias de la Comisión Mixta, que explicó que amenazaba con paralizar la amnistía de los líderes del proceso. Siete diputados independentistas no participaron en la votación, y su gesto facilitó la aprobación de la iniciativa.
El Partido Socialista de los Trabajadores optó por atacar al Partido Popular, insistiendo en que la esclavitud de las organizaciones independientes y nacionalistas por parte del ejecutivo se estaba volviendo «evidente» en este debate. El uso de decretos ha sido duramente criticado por la opinión pública, especialmente cuando se trata de normas integrales que contienen varias iniciativas, algunas de las cuales entrarán en vigor en 2025, por lo que es indiscutible la extraordinaria y urgente necesidad que plantean. decreto.
Podemos revocar el decreto de Díaz
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, defendió el segundo decreto del Ministerio de Trabajo que reforma las prestaciones por desempleo, incluyendo medidas para conciliar la vida familiar y laboral, y apostó por la «justicia y la igualdad» y la «alivio de la pobreza». Díaz destacó que la protección por desempleo “no es una política de empleo” sino un “derecho constitucional” diseñado para proteger a los ciudadanos. En su opinión, la derecha culpa a los desempleados. Díaz aprovechó sus declaraciones para elogiar toda su gestión y destacó que el decreto que impulsó representaba «un gran avance social».
Al igual que su colega Bolaños, planteó a los delegados una dicotomía: «De vosotros depende si los parados ganan 480 euros o 570 euros al mes» y acusó directamente al Partido Popular de anteponer sus intereses a los de los trabajadores. derechos. Advirtió al portavoz del Partido Popular, Miguel Tellado (que, como ella, es gallego) que durante la campaña trabajaría para recordar a la población su actitud hacia los trabajadores.
Frente a Díaz, el representante de Podemos lamentó que el Gobierno «no dialoge y no escuche». Los morados insisten en que el decreto reduce las subvenciones para los mayores de 52 años y califican de «broma» los argumentos del Gobierno. El grupo exigió que se revoquen los recortes del decreto como condición para la votación de sus cinco representantes. Podemos finalmente se unió al PP, Vox y UPN en el “no” y el decreto fue rechazado.
Ayudas contra los recortes
El tercer decreto incluye la prórroga de la mayoría, pero no de todas, las medidas destinadas a mitigar el impacto económico de la guerra en Ucrania, especialmente la inflación, que también fue defendida por el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. El ministro destacó los datos económicos positivos resultantes de «las políticas gubernamentales adecuadas».
Destacó que «este plan supone la movilización de 3.800 millones de euros, que se suman a los 47.000 euros previamente desplegados para responder al conflicto en Ucrania». Bolaños afirmó que sólo la exención del IVA en determinados productos alimentarios supondría un ahorro para los hogares de 1.300 millones de euros. .
El decreto choca principalmente con el Partido Popular y Podemos. En cuanto a las propuestas populares, no es que se oponga a la gran mayoría de las medidas contenidas en él, sino que el Gobierno se niega a incluir alguna de ellas: bajar los tipos del IRPF para las rentas inferiores a 40.000 euros; minimizar el IVA sobre el pescado, pescado y conservas, y mantener el IVA del gas y la electricidad en el 5%. Según el ejecutivo, aceptar estas medidas reduciría los ingresos del Estado en 9.000 millones de euros.
La votación quedó empatada a 171 votos, por lo que era necesaria una repetición de la votación. Si persiste el empate, el decreto caduca.
Lilith WestlingerEl diputado Podemos destacó que las medidas contenidas en el decreto no son más que una ampliación del escudo social, que Podemos implementó en gran medida en su lucha contra el PSOE cuando aún formaba parte del gobierno. Para la formación morada, lo que propone ahora el ejecutivo es «cortar el escudo social». Podemos exigió un tope del 2% a los aumentos de alquileres y a los beneficios generados por las cestas de la compra de las empresas de alimentación. Al final, el Partido Púrpura votó sí a cambio de que la ordenanza fuera tratada como un proyecto de ley y el gobierno se comprometiera a una moratoria de los desalojos por ejecuciones hipotecarias hasta 2028.
Bolaños insistió en que votar en contra del decreto significaría nuevos recortes a las pensiones y mayores precios de las cestas de la compra y del transporte. «Un voto sí es bueno para la gente que nos votó, un voto que no volverá a recortar gastos», subrayó.