El martes, el Parlamento Europeo organizó un taller en Bruselas sobre digitalización y seguridad jurídica para las empresas. A la reunión asistió la presidenta del Colegio de Registradores, María Emilia Adán, así como representantes del Consejo y del Parlamento Europeo.
María Emilia Adán explicó que el Registro Mercantil es una de las piezas clave de la regulación europea y nacional de las sociedades mercantiles, ya que facilita las transacciones comerciales legales a la vez que les proporciona seguridad jurídica. En ese sentido, agregó el Decano, la seguridad jurídica significa que los litigios son raros y atraen a los inversores, mientras que la inseguridad asustaría a los inversores.
El Decano se refirió al Sistema Europeo Interconectado de Registros Mercantiles, disponible en la plataforma e-justice, que permite acceder a información básica sobre sociedades mercantiles en todos los Estados miembros de la UE. En todas estas agencias está el Registro Mercantil, una agencia que ya está avanzada en cuanto a la digitalización.
Adán señala que la digitalización de la vida empresarial es necesaria para facilitar el flujo legal de los negocios, pero no puede desmantelar una de las claves de la seguridad jurídica comercial: el control de la legalidad por parte del Estado, autoridades legales, independientes y objetivas, dijo Adán. Los registros mercantiles y los registradores encargados de ellos aseguran al decano el desempeño de una labor esencial para la vida mercantil con seguridad jurídica, concluye el decano del colegio de registradores.
Daniel Calleja, Director General de Asuntos Jurídicos de la Comisión Europea, centró su intervención en tres aspectos relacionados con la digitalización: el esfuerzo de la Comisión Europea por dotar al 80% de la población de habilidades digitales; la transformación digital de los temas medioambientales y la formación en habilidades digitales.
Por su parte, Ana del Valle presentó EBRA en representación de EBRA, un organismo de 42 miembros fundado con un doble objetivo; por un lado, el trabajo en red como medio de cooperación jurídica internacional, por otro lado, el diálogo con los instituciones
Ana Gallego, directora general de Justicia y Consumo de la Comisión Europea, recordó que el Covid-19 es un ejemplo práctico de cómo la digitalización ha adaptado y facilitado el modo de vida de los europeos, y añadió que la necesidad de digitalización está surgiendo para los ciudadanos y los problemas a los que se enfrenta. por las empresas en el ejercicio de sus derechos.
Lora Villar, Ministra de Justicia y Coordinadora de la Representación Permanente de España ante la Unión Europea, realizó un análisis detallado del plan de acción y trabajo de la Comisión. A su juicio, el Registro Mercantil, como institución, tenía algo de qué enorgullecerse a nivel nacional.
Juan Fernando López Aguilar, presidente de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior, manifestó su respaldo al sistema español de seguridad jurídica, al que calificó de modelo, y destacó la necesidad de avanzar en la interoperabilidad de la sexualidad, avanzando en el tema del pago de aranceles, reconocimiento de sellos y firmas electrónicas, en definitiva, avances en la cooperación transfronteriza, superando las divisiones nacionales pero dotándolas de seguridad jurídica.
Finalmente, Juan Ignacio Zoedo, miembro de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Parlamento Europeo, dijo en su intervención que la adaptación del registro mercantil a la digitalización sería un gran logro para las empresas, los ciudadanos y la administración pública. Zoido cree que las garantías legales de calidad adaptadas a la era digital ayudarán a avanzar en un marco global basado en la igualdad, la generosidad y la cooperación. La digitalización no es perfecta, pero cree que puede ser dirigida por comités.