Nueva York hace justicia al diseño latinoamericano del siglo XX

Nueva York es un lugar de justicia, reparación y reconocimiento. Tiempos modernos: Brasil, México y Venezuela (1940-1978) El diseño de la vida cotidiana es ante todo una declaración. En esta ciudad en particular, y en Estados Unidos en general, el diseño latinoamericano ha quedado irresuelto desde mediados del siglo pasado, tradicionalmente olvidado o incluso despreciado a pesar de su alta calidad. Ella es Gabriela Rangel…

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes una cuenta en PeriodistasdeGenero, puedes utilizarla para acreditar tu identidad

Nueva York es un lugar de justicia, reparación y reconocimiento. Tiempos modernos: Brasil, México y Venezuela (1940-1978) El diseño de la vida cotidiana es ante todo una declaración. En esta ciudad en particular, y en Estados Unidos en general, el diseño latinoamericano ha quedado irresuelto desde mediados del siglo pasado, tradicionalmente olvidado o incluso despreciado a pesar de su alta calidad. Gabriela Rangel, directora de artes visuales de la Sociedad de las Américas/Consejo de las Américas (AS/COA), organismo organizador de la exposición, la define como “un punto ciego en la modernidad latinoamericana”. Desde este miércoles y hasta el 16 de mayo se empieza a rectificar esta injusticia, la exclusión de historiadores y museos.

«La exposición ofrece algo que ha escapado a la atención de los historiadores del diseño. Incluso dentro de los propios países, particularmente en México y Venezuela, ha habido poca investigación al respecto, ninguna colección en museos y pocas exposiciones. Curadora de la exposición Una de las mexicanas, Ana Elena Mallet, escritora independiente y experta en arte y diseño mexicano contemporáneo, dijo a El País: “Verás cosas nuevas en Nueva York. «

«En 1940, a medida que se desarrollaba el desarrollismo, estos países necesitaban un buen diseño en materia de vivienda, educación, salud y otras áreas. Eso es lo que se podía ver en Nueva York», enfatiza su colega Mallett. «En el México posrevolucionario, el diseño era un proyecto nacional y una forma de integrar a los indígenas al sistema, tanto física como simbólicamente», añadió el experto mexicano en la introducción de la exposición.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí