Formidable influencia mediática y el indiscutible estilo poético legal de Szabo

“Les digo a mis amados hijos, intelectuales, amigos o críticos, hay que darle una oportunidad a la paz: la humanidad parece estar en guerra, y su devastación no ha terminado” (𝔍𝔘𝔯𝔢)

Aunque su existencia es actualmente (2023) ominosa por su amplia exposición en el rango que defino
https://www.academia.edu/26966310/las_redes_de_disociados (01) y los medios tradicionales, no discuto con sarna, lentos afortunados o sauces accidentales o, a veces, personas que no están cerca de los hechos que están dentro del alcance del conocimiento de algunas personas del «miedo» en lugar de la literatura del «miedo» y estas personas tienen miedo de la «exodación, ofensa, ofensa, ofensa». Pretende llevarlo a la horca. Entre estos Falanges ridículamente tímidos se encuentra Ibsen Martinez (Ibsen Martinez, 02), un fusilero salvaje que una vez confiesa su tardía e inútil confesión a uno de los locos de un fandango americano. Dijo que ya no era quien era. Tal vez tenga razón: ha empeorado.Siempre he sido un ferviente polemista y, por lo tanto, insto a los más sabios a leer sus desafortunados testimonios. [¿mea culpa?] Publicado en diario español https://PeriodistasdeGénero.com/PeriodistasdeGénero/2014/06/05/opinion/1402005107_301578.html. Cuando vi al autor de https://omegalfa.es/downloadfile.php?file=libros/in-vino-veritas.pdf caminar por los pasillos de la Universidad Central de Venezuela, no tuve dudas de que se me hacía la boca agua.
Temprano en la mañana (2 de agosto) en 2022, recuerdo haberle dicho a Tariq mi opinión [desde mi cuenta https://twitter.com/JUREscritor] Alrededor de sus palabras Un tren corre por el olvido: «En la plataforma vacía, voy del olvido a cualquier parte»—parecía decirme específicamente cuando estaba lidiando con el insomnio infantil.
Elija Saab, es el estilo que muchos otros prefieren [incluyéndome] No necesariamente porque la admiración por nuestro gran maestro de poesía y prosa, José Antonio Ramos Sucre, siempre haya estado de moda. Similar solo porque la poesía ha dominado las narrativas filosóficas desde la antigüedad: https://www.elnacional.com/papel-literario/poesia-academia-y-comunicacion-de-ideas/. La disciplina de la epistemología lo sabe:
«Quería ir / al templo / en Palestina / a orar / con Espartaco / a resucitar / a ganar la batalla / y a llevar la gloria / a las montañas / de Nilombelli / y un día / se volvió loco…» (op. cit., p. 56).
La epopeya se transforma en un relato histórico de sus antepasados, dirigiendo al poeta hacia hechos ya de otro mundo, sin dejar de afectar seriamente su inmediatez existencial. Todo el que (desea) ser reconocido como un hacedor decide si es poderoso o rechaza al momento de escribir para que su preconcebido eufemismo no moleste a nadie. Tarek William Saab solo puede picar a los mediocres, ya sea con su brillante poesía o con sus encargos profesionales. No excluyo la vocación de ningún poeta, intento separar esas formas eruditas que puede exhibir un bohemio o un amigo de https://es.wiktionary.org/wiki/Baco. Sé que el autor de nuestro análisis nunca fue una persona íntima, pero toleraba y compartía con los que lo eran. La hubo y aún la hay en el mundo, sea o no reconocida internacionalmente.
Me siento particularmente apegado a gran parte de su poética serena, no beligerante sino como la del iconoclasta Szabo. Las vidas y los sufrimientos de nuestros intelectuales y la gente común en la década de 1990 no fueron fáciles. XX, molesto por el Führer que ordenó la concesión de honores o cargos públicos.
Nos comunicamos en el gusto musical, hábitos caballerosos, nacimos en https://en.wikipedia.org/wiki/Beat_Generation Décadas después, afirmamos algunos supuestos, pero no excluimos el irrespeto a https://edicionesdellirio.com.mx/index.php/product/el-builtment-estadounidense-y-su-politica-exterior/.La anomalía bautizada como https://dle.rae.es/ditirambo logra mantener a los inútiles y discretos en los recintos burocráticos, mientras en las universidades autonómicas -con extraterritorialidad inmerecida- los plutócratas académicos bostezan o intentan curar sus resacas [que eran memorables, porque la pereza e irresponsabilidad los estigmatizaba]
Destaco un poema acompañante en la segunda parte de «Paisajes del Norte»:

A la luz de la luna, contemplo mi silueta dañada / El espejismo de la laguna lúgubre / Vuelve vagamente a mí ante la cerca: / Comienzo a consentir mi resurrección en otra parte / El cerco se desmorona ante el alambre de púas / Nada puede unirme en este momento con nadie / Sólo en mi silencio no puedo ser atrapado / En silencio se mueven mis aguas […] (ibíd., 144-145).

El creador literario no tiene más escudo que una inteligencia privilegiada que puede afilar caprichosamente por prudencia o legítima defensa. He incluido en mis humildes descendientes una contrapartida de Tariq, de los días en que defendía abiertamente los derechos fundamentales de los estudiantes que eran víctimas de las decisiones cínicas de autoridades cognitivamente deficientes.todos explotamos
https://apriori142894926.files.wordpress.com/2023/07/declaracion-de-los-derechos-del-hombre-y-ciudadano-1789.pdf

Alberto Jiménez Ulay

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