El gobierno implementa beneficios de desempleo largamente esperados para el trabajo de aculturación intermitente

El estreno más esperado en el mundo cultural no es una película, una novela o un disco. Tampoco aparece en escritorio ni se juega en consolas: es de la ministerial. Sí, la intención es que sirva precisamente para asegurar y reforzar el presente precario y el futuro incierto del creador artístico. Porque el real decreto aprobado por el Gobierno este martes incluía dos medidas culturales clave: la prestación por desempleo sin precedentes para dar cabida a la precaria situación del sector, por primera vez en la historia de la democracia española; la prestación capacitiva…

suscríbete para seguir leyendo

Más información

De esta forma, los administradores pretenden reconocer a nivel laboral la compleja realidad que viven y padecen muchas veces los profesionales del arte: son semanas de mucho trabajo, teléfonos que suenan sin parar y carteras en marcha; pero casi todos se enfrentan a varios meses de inactividad. silencio y cero ingresos. Y, con suerte. Porque en muchos casos, la cantidad de días de trabajo en un año es solo un puñado. En definitiva, de forma intermitente, por ejemplo, lo que la legislación francesa viene contemplando desde hace muchos años. Y, ahora, el Real Decreto español también quiere proteger.

Como resultado, se ha reducido el requisito para recibir beneficios de desempleo: los artistas y técnicos deberán contribuir aproximadamente la mitad del tiempo en comparación con las contribuciones de 360 ​​días que normalmente se requieren durante los últimos seis años, un umbral cercano a lo que han propuesto los delegados. El Ministerio de Cultura propuso durante las negociaciones al Ministerio del Trabajo y Socioeconomía, encabezado por la vicepresidenta Yolanda Díaz. En concreto, además de los sindicatos CC OO y UGT, estuvieron en la mesa el Sindicato de Actores, ConArte (Sindicato de Artistas Interpretativos), el Sindicato de Músicos y Alma, el Sindicato de Escritores.

La duración exacta del beneficio se dará a conocer este martes: en el último borrador, se fija en 120 días. Su monto también ha sido objeto de largas negociaciones y solo se determinará en una conferencia de prensa anunciada por el gobierno. También se sabrá si acaba en este real decreto o tendremos que esperar un poco más a que finalice otra medida, en este caso del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social e Inmigración: Cuotas Especiales para los Autónomos del salario de los trabajadores. empleados en el sector cultural son muy bajos, por debajo de los 3.000 €.

Las cifras oficiales -del Anuario de Estadísticas Culturales 2022 del Ministerio de Cultura y Deportes- refuerzan la necesidad de nuevas medidas. En 2021, el sector cultural empleará a 690.800 personas, lo que supondrá el 3,5% de la población activa. Pero solo se pagó el 66,6 por ciento, en comparación con el promedio general del 84,1 por ciento. Solo uno de cada dos tiene contrato indefinido, de nuevo por debajo de la media nacional (63%). La misma inestabilidad se muestra en el mundo empresarial: el término «industrias culturales» en realidad se refiere a una industria, y de 128.741 empresas registradas, el 67,1% no tenía empleados (es decir, eran autónomos), mientras que el 26,8% de las empresas tiene uno y cinco.

Además, el real decreto busca completar otro trabajo pendiente desde hace muchos años: a partir de 2019, los artistas jubilados pueden cobrar una pensión al mismo tiempo que adquieren los derechos de autor. A partir de ahora, también podrán recibir ingresos por actividades artísticas. Es decir, básicamente, una creación constante, como los nombres de las plataformas que nacen para promover este reclamo. Sus miembros han denunciado casos de multas a escritores o suspensión de sus pensiones por los ingresos generados por sus obras.

Todas estas medidas han sido demandadas por un gran segmento de las artes durante mucho tiempo. Al menos desde 1980 cuando la UNESCO aconsejó a sus estados miembros desarrollar un marco regulatorio adecuado para el sector. La situación ha empeorado desde que un subcomité ad hoc en el Congreso acordó un informe de 75 puntos en junio de 2018 para preparar las llamadas regulaciones de artistas.

Algunas se fueron convirtiendo en ley con el tiempo, como el nuevo “Contrato de Trabajo Artístico Temporal”. Sin embargo, muchos de los principales cambios se han producido a raíz del tiempo, los paros, los retrasos y la pandemia, lo que ha convertido a la industria en una de las más afectadas. Tanto es así que algunos recuerdan que si las medidas aprobadas ahora hubieran estado vigentes en su momento, habrían brindado a los trabajadores culturales un refugio que no tenían antes del huracán que los asoló.

Por ejemplo, la música popular y las artes escénicas perdieron un tercio de sus representaciones y más de la mitad de sus audiencias entre 2019 y 2021, según la última encuesta de hábitos culturales del Ministerio de Cultura y Deporte. La Unesco advirtió en un informe el pasado febrero que la situación de muchos artistas había «pasado de precaria a insostenible» debido a la pandemia, con la industria perdiendo entre un 20% y un 40% de sus ingresos solo en 2020. Para los que ya lo cerraron o lo abandonaron, puede que sea demasiado tarde. Al menos los que aguantan el viento y la lluvia llevan paraguas desde entonces.

El propio gobierno también está un poco retrasado en sus compromisos. En julio de 2021 formó un comité interministerial para sacar adelante el proyecto. En diciembre del mismo año, Díaz y el ministro de Cultura y Deportes, Mikel Eseta, se comprometieron a promulgar todo un Reglamento de Artistas para 2022. En este caso, se equivocaron a las pocas semanas. Sin embargo, en realidad, se necesitará más para determinar que los 75 informes de 2018 son legítimos. Cuestiones fiscales, por ejemplo, cuestiones relativas a la retención del IRPF. El objetivo final es proporcionar condiciones de trabajo más justas para los artistas. Seguir creando, al fin y al cabo, seguir comiendo.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí