Las tensiones entre los partidos independentistas que exigen apoyo al ejecutivo a cambio de un apoyo de la minoría parlamentaria se han transferido ahora a los pilares ideológicos del Partido Socialista de los Trabajadores. Al actualizar su ideología política, la mayoría de los socios de la coalición proponen reducir el control estatal «consolidando» procesos de «cogobernanza» con las comunidades.
En concreto, el partido Pedro Sánchez Proponiendo «un fortalecimiento de la regulación en los niveles constitucional y subconstitucional», un marco de cooperación entre instituciones «que permita a las entidades autónomas asumir efectivamente la corresponsabilidad en la determinación de las políticas públicas y promover mecanismos de cooperación vertical», Ramon Cloya y los Territorios, así como la administración regional “Niveles” entre instituciones. Se trata de un paso decisivo hacia el modelo federal impreso por la dirección de Ferraz en 2013, que ha ido evolucionando a lo largo de los años hasta incluir términos como «multiétnica» y «España moderna y multicapa», pero sin detalles.
El alcance de este proceso de devolución quedó claro después de que Junts reclamara una transferencia «plena» de competencias en materia de inmigración a la comunidad autónoma de Cataluña como precio por abstenerse de aprobar tres decretos sobre justicia, medidas anticrisis y empleo. Los socialistas se han negado hasta ahora a informar sobre el contenido de la transferencia, salvo para dejar claro que no afectaría a los controles fronterizos y que tendría que promulgarse mediante ley orgánica, que requiere la aprobación de una supermayoría.
Sánchez no ha dado señales en el actual cuerpo legislativo de reformar el artículo 49 de la Constitución para cambiar la palabra “discapacitado” por “discapacitado”, ya que ello requeriría necesariamente el apoyo del Partido Popular. Por ello, ha optado por impulsar un modelo territorial que “mejore el funcionamiento de instrumentos que involucren a las comunidades en la toma de decisiones y la implementación de medidas, con la lealtad institucional como clave”.
Aunque la «cogobernanza federal» ya fue considerada en las resoluciones del último congreso federal del Partido Socialista de los Trabajadores en Valencia en 2021, no se ha abordado su implementación. Citó la experiencia de un «foro colegiado» entre el Gobierno central y las comunidades autónomas que «ordenó» el inicio de la pandemia de la COVID-19, limitándose a plantear la necesidad de desarrollo, «obviamente partiendo de respetar los niveles respectivos». Capacidad. ».
“Los beneficios de la descentralización”
El documento que se presentará en el congreso político del partido este fin de semana en A Coruña afirma ahora explícitamente que las «técnicas» para la participación de estas comunidades en la toma de decisiones son «diversas desde un punto de vista jurídico» pero «desde un punto de vista político Desde esta perspectiva, todas estas fórmulas responden al mismo propósito: preservar los beneficios de la descentralización evitando sus riesgos. «
Además, en su nueva ideología, el Partido Socialista de los Trabajadores sostiene ahora que la amnistía es «completamente constitucional», lo que hace que esta medida de indulgencia esté disponible hasta el 23-J para quienes sean procesados mediante este procedimiento, afirmando que no tiene cabida en la constitución, lo que es su columna vertebral ideológica. «El escenario para un reencuentro completo».
Del mismo modo, el partido liderado por Sánchez, rodeado de personas afines, ha completado la transformación del «muro» que construyó contra la derecha en su discurso inaugural en sus presupuestos internos. En su documento político describe «una derecha colonizada por la ultraderecha, sin un plan eficaz para articular el pluralismo político y la diversidad territorial de España».Aun así, insistió en que su intención era llegar a un acuerdo «con todos, derecha e izquierda, incluido el PPP» y instó al partido a hacerlo Alberto Núñez Fejo «Repensar su relación con Vox antes de que sea demasiado tarde».