La Audiencia Provincial de Vizcaya condena al Ayuntamiento de Bilbao por pagar una indemnización de 30.000 euros al arquitecto Santiago Calatrava por «alterar» su obra en el Puente Zubi-Zuri, añadiendo una pasarela que facilita el acceso a la Torre Isozaki. Además, sostuvo que en este caso el «interés general» no prevalece sobre los «derechos morales» del autor. En esta decisión, la Sala Cuarta del Tribunal de Vizcaya estimó parcialmente el recurso de apelación de Calatrava contra la resolución de 16 de noviembre de 2007 del Juzgado Primero de lo Mercantil de Bilbao, que desestimó las pretensiones de Calatrava. El arquitecto valenciano entendió que aunque su obra fuera modificada, el interés público prevalecía sobre los derechos de autor.
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Santiago Calatrava demandó al ayuntamiento y a las promotoras inmobiliarias Vizcaína de Edificaciones y Larian 95, argumentando que la pasarela conectada a la Torre Isozaki afectaba sus derechos morales y la integridad de la obra, por lo que solicitó su demolición y, además, obtuvo una indemnización. de 250.000€. Si no se acepta la demolición de la infraestructura, se exige una indemnización de al menos tres millones de euros.
La sentencia del juzgado de Vizcaya coincide con el juez de lo mercantil Edmundo Rodríguez Achutegui en que «la obra diseñada y ejecutada por el señor Calatrava fue alterada por la obra diseñada posteriormente por el señor Isozaki». Sin embargo, la jurisdicción vizcaína no dio la razón al presidente del Juzgado Primero de lo Mercantil de Bilbao, aunque admitió que «se había producido una alteración de la obra» con lo que «violando los derechos morales a la integridad de la obra», argumentó Calate Rava. Calatrava se vio obligado a «sufrir esto en respuesta al servicio público que presta dicha obra» porque facilita la comunicación peatonal entre ambos puntos de la ciudad.
Beneficio público «limitado»
La Audiencia Provincial consideró que «el Puente Zubizuli sí sirve al interés público, pero se limita a la comunicación entre las dos orillas de la ría, que entonces no existía, y los ciudadanos están obligados a hacerlo» cruzando el puente más cercano Al otro lado: el Puente del Ayuntamiento o la llamada solución central que conduce a la Alameda de Rekalde, «con el consiguiente desplazamiento e molestias».
Asimismo, señala que «sólo en el nivel de posibilidades» se podrá cruzar el Zubi Zuri «sin modificaciones en el mismo y luego acceder a la Alameda de Mazarredo por otros medios (rampas, escaleras, ascensores), para finalmente completar el PGOU y el Gobierno pueden arbitrar”.
Por lo tanto, consideró que las entidades municipales y las entidades encargadas de la promoción e implementación de partes del programa en la zona (el Municipio de Uribiat, Australia del Sur y el Municipio de Campovolantin, Australia del Sur) habían “tomado medidas por sí mismas y en a su exclusivo criterio” en favor de la culminación y realización de sus objetivos”. “Crearon una determinada situación objetiva previa -el Puente Zubizuri, diseñado, construido e incluso recibido por el ayuntamiento- que posteriormente, sin consentimiento ni conocimiento de Calatrava, lo bajó, modificando su obra, cambiando de lado y continuando por otro paseo, cuyo estilo artístico arquitectónico del famoso autor es completamente diferente al del recurrente”, señaló.
Señaló que esto significó que «su obra fue afectada irreparablemente y vulnerados sus derechos morales a su integridad». Asimismo, recuerda que “el gobierno, como artífice del plan director de la zona, era el único que sabía que el objetivo final no era sólo unir físicamente los dos lados de la ría sino también facilitar el acceso a la zona. ”. Los vecinos del Campo de Volantín, Castaños, Matiko y otras zonas van por la Alameda de Mazarredo hasta el centro de Bilbao”. Por eso, subrayó, “a pesar de ser consciente de ello, decidió contratar a un Arquitecto de renombre”, en lugar de diseñar la obra completa de realización del mencionado plan director -que podrían haber hecho muy bien- se limitó a diseñar y construir un puente con el único fin de cruzar la Ría Campo de Volantine hasta el Puerto Deportivo Uri Bitart”.
Considera que «es inaceptable que una vez finalizado el Puente Zubi Zuri se alcancen los objetivos del PGOU modificando físicamente el propio puente (la forma de las barandillas) en detrimento de los derechos de propiedad intelectual del puente y de su autor» y el estilo único que lo inspiró, sin duda influenciado por la adición y ampliación de una pieza diferente, diseñada por otro arquitecto igualmente prestigioso y mundialmente reconocido, como el Sr. Isozaki, quien » Observando que toda la obra puede haber sido encargada por el mismo arquitecto, «ya sea el señor Calatrava o cualquier otra persona», señaló que una vez terminado Zubi Zuri, «podría arbitrarse otro proyecto de Ingeniería». A diferencia del Sendero Isozaki, este sendero permite un acercamiento diferente a Mazaredo, pero no requiere contacto con el Puente de Calatrava en absoluto.
La resolución judicial declara el Puente Zubizuri «un objeto protegido por la ley de propiedad intelectual como obra de arte original» -punto ya reconocido en sentencias de instancias inferiores- cuya obra y estilo arquitectónico reconoce Calatrava. «se alteran y modifican en todo el mundo y los “derechos morales” del arquitecto valenciano “no se extinguen, anulan o excluyen en este caso por razón del interés público al que la obra contribuye o satisface”. La Audiencia de Vizcaya sostuvo que el derribo del Camino Isozaki “supondría restituir los derechos morales vulnerados a la integridad de las obras de Zubi Zuri, pero frente a intereses generales, globales o civiles”.
Cantidades “desproporcionadas”
Asimismo, ha considerado la petición del arquitecto valenciano «completamente desproporcionada» ya que «supera todas las medidas de prudencia». «El recurrente pretende aumentar sus ingresos porque su derecho moral al respeto a la integridad de su trabajo ha sido violado al ganar casi cinco veces lo que gana en su trabajo profesional, lo que no puede explicarse más que un ego intolerable – dijo el actor Complacencia y exceso en el contenido de derechos morales de la obra terminada o de los resultados objetivos de la obra”, subrayó. Además, decía: «La infracción adicional del trabajo de Isozaki no fue el resultado del capricho de alguien de infringir injustamente los derechos morales del señor Calatrava».
Sin embargo, consideró que «el puente diseñado por Calatrava ha sido alterado, ha perdido su integridad y su estilo arquitectónico se ha confundido», pero «su trazado y la mayor parte de su estructura no se ha visto afectado, ni ha pasado por ninguna de las orillas». Se accede por rampas y escaleras, ni su denominación habitual «Puente Zubizuri» o «Puente de Calatrava» es una clara referencia a su autor. “A pesar de estar influenciada por la extensión peatonal del señor Isozaki, se alza majestuosa sobre la ría de Bilbao en el centro de la ciudad y sigue siendo objeto de publicidad gráfica en la comunidad turística y en general y en las publicaciones de arquitectura en particular. Obra de Calatrava”, afirmó .
El Puente de Calatrava está conectado con el puente peatonal Isozaki en la desembocadura del río Bilbao, lo que ha causado polémica.san cirilo
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