La sexta edición de la feria creció un 30% y destacó por su enfoque africano y artistas poco vistos en España
A finales del siglo XVIII, Cordoaria de Lisboa fabricaba cuerdas y velas para armadas y flotas que comerciaban con Brasil y África. En este edificio histórico frente al río Tajo, la feria ARCOd destaca por su especial enfoque en el arte contemporáneo africano, con importante participación de países como Angola, Mozambique y Sudáfrica. Si la ventaja de ARCOM Madrid es el puente con América Latina, entonces la ventaja de Lisboa es África.
Manuela Pimentel pinta sobre cartón y baldosas cerámicas. Este no es un cubo blanco
La sexta edición experimentó un crecimiento de más del 30%: el número de galerías pasó de 65 en 2022 a 86 de 23 países (un tercio de Portugal). «En Lisboa se abren cada vez más galerías o se crean otras galerías internacionales. ARCO cuenta lo sucedido en esta escena. El núcleo ibérico es el más fuerte de la muestra y queremos mostrar la riqueza del arte portugués desde su contexto», destaca la directora Maribel López. En Portugal destacan un gran número de artistas femeninas, entre ellas Mónica de Miranda ( Mónica de Miranda , Manuela Pimentel, Mané Pacheco, María Condado…
A diferencia de las grandes ferias de Madrid, la feria de Lisboa es una propuesta más relajada y con una forma simplificada que destaca en cuanto a la estética (y la belleza) de Cordoaria. «Lisboa tiene un encanto enorme y los espacios son muy diferentes. El contenido es diferente al de Madrid, sino no tiene sentido”, afirma López. Hay galerías españolas legendarias en Lisboa (no habría ARCO sin Juana de Aizpuru, Helga de Alvear o Elvira González), pero también. galerías portuguesas icónicas como Bruno Múrias, Madragoa o Vera Cortês Pero la diferencia está en las galerías con conexiones africanas: algunas tienen doble sede (Esto no es un White Cube y Movart en Angola, otras son de Marruecos (African Arty y Atelier); 21), Sudáfrica (Afronova y Guns & Rain) o Mozambique (Arte de Gema), mientras que las galerías europeas destacan por su profesionalidad (Gallery 193 en París o Artco en Alemania). Todas proponen nombres interesantes desde latitudes casi inaccesibles. a España: el camerunés Victorien Bazo, las mozambiqueñas Eugénia Mussa, Teresa Roza d'Oliveira y Reinata Sadimba, la sudafricana Dimakatso Mathopa…
«Recepción en la casa de la palabra» del camerunés Victorien Bazo. artístico africano
«Efecto Lisboa»
En los últimos años, la capital portuguesa se ha posicionado como una de las ciudades más atractivas en la escena artística, con su clima, alquileres asequibles, políticas fiscales favorables y una vibrante escena alternativa que atrae a artistas de todo PeriodistasdeGénero.
“Venir a Lisboa fue una gran decisión. Aquí hay una tradición de coleccionismo muy fuerte. Además, hay nuevos residentes en Lisboa, un fenómeno que comenzó hace unos años cuando franceses y brasileños se instalaron en la ciudad. Todo el tiempo llega gente nueva de Estados Unidos, lo cual es un elemento muy importante para el espectáculo”, explica Maribel López. El multiculturalismo de Lisboa da a ARCO su carácter único.